Lidiar con las Inquietudes Sobre la Salud

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Women prepare veggies and fruits on a cutting board in a brightly lit kitchen

Un diagnóstico de cáncer puede dificultar el mantenimiento de una dieta saludable y un estilo de vida activo. Usted puede experimentar fatiga o enfrentar desafíos de comer relacionados con su tratamiento. Sin embargo, muchos beneficios vienen con mantenerse activo y mantener una buena nutrición durante y después del tratamiento del cáncer. El consumo de tabaco o sustancias también puede ser una preocupación cuando se enfrenta al cáncer. Descubra como crear un plan de ejercicios personalizado, abordar los problemas de fatiga y alimentación y mantener un estilo de vida saludable.

 

Cambios en la Capacidad de Hacer Ejercicio

Después de recibir un diagnóstico y tratamiento de cáncer, puede preocuparse de que no se esté moviendo tan bien como le gustaría. Cosas como caminar, subir escaleras y levantar cosas pueden sentirse más difíciles ahora. Algunas de estas limitaciones pueden ser temporales, otras más duraderas. De cualquier manera, es importante que hable con su médico acerca de comenzar o reiniciar un programa de ejercicios. Hay cosas que puede hacer para mantenerse activo y sentirse mejor tanto física como mentalmente.

 

Conoce Sus Limites

El ejercicio o la actividad física pueden ser una parte importante para mejorar su salud física y emocional durante y después del tratamiento. Es importante establecer objetivos realistas. Considere su programa de tratamiento, el tiempo disponible, cómo se siente en un día determinado y otros factores. Trate de priorizar el ejercicio. Esto le ayudará a sentirse más fuerte, a dormir mejor y a mejorar su estado de ánimo.

Recuerde que no necesita correr una maratón. Algunos días incluso sentarse en una silla en vez de acostarse en la cama será tanta actividad como usted puede hacer. Limpiar la casa, pasear al perro o estirarse también son formas de ejercicio. Investigaciones recientes muestran que la actividad física puede incluso reducir la probabilidad de que el cáncer regrese.

 

Personaliza su Plan de Ejercicios

El ejercicio personalizado consiste en cambiar el movimiento del ejercicio para que se ajuste a la forma en que se siente en un día determinado. También significa cambiar el ejercicio para adaptarse a cualquier limitación física o de otro tipo que pueda tener. Se sentirá muy diferente inmediatamente después de completar el tratamiento que meses o años después. Usted puede todavía ejercitar en cualquier punto durante ese tiempo, pero la manera que usted ejercita debe mirar diferente. Al principio, puede que camine muy lentamente desde el sofá hasta el buzón y regrese. Un mes después, es posible que tenga la energía para caminar lentamente alrededor de la cuadra. Un año después, puede caminar alrededor de la cuadra 4 veces.

Las actividades como la limpieza o la jardinería también cuentan como ejercicio. Usted puede no sentir esfuerzo físico, pero ese esfuerzo todavía es bueno para usted, no importan cuan pequeño sea. El ejercicio puede hacer que se sienta mejor, incluso si se sentía con náuseas, agotado o triste antes de hacerlo. Las siguientes sugerencias le ayudaran a “leer” cómo se siente en un momento determinado y, a continuación, personalizar el ejercicio para que se adapte a sus sentimientos:  

  • Si usted se siente enfermo, el ejercicio puede ayudar a disminuir las náuseas. El ejercicio cuando se sienta enfermo debe ser suave, lento y breve.
  • Si esta fatigado o extremadamente cansado, el ejercicio puede darle energía (si es suave, lento y breve). Usted puede hacer siempre más en un día en que usted no esta tan cansado.
  • Si no duerme bien por la noche, el ejercicio durante el día puede ayudarle a dormir mejor.
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La Fatiga

​​​​​​Casi todas las personas que reciben tratamiento contra el cáncer dicen sentirse, en ocasiones, demasiado cansadas para hacer las cosas que necesitan o quieren hacer. La fatiga que causa el cáncer es un sentimiento de cansancio que puede tener poco que ver con la actividad física que realiza o la cantidad de tiempo que duerme. Sentirse demasiado cansado no significa que el cáncer está empeorando o que su tratamiento no está funcionando. De hecho, en parte, esa fatiga puede deberse a que su cuerpo está trabajando junto con el tratamiento para destruir el cáncer. Existen muchas causas distintas para la fatiga que se experimenta durante el tratamiento y aún después de que el tratamiento ha terminado. Entender la causa de su fatiga los ayudará, a usted y a su equipo de atención médica, a implementar un plan que le permita manejar la fatiga lo mejor posible.

La fatiga puede ser difícil de manejar. Puede afectar su bienestar físico, mental, social e incluso financiero. La realidad es que tendrán días buenos y días no tan buenos. Esto es algo normal en el proceso de recuperación del cáncer.

Recuerde que sentirse demasiado cansado para hacer las cosas que necesita y quiere hacer durante y después del tratamiento contra el cáncer es muy común. Generalmente, la fatiga comienza a sentirse gradualmente conforme el tratamiento se desarrolla y puede que pase algo de tiempo (posiblemente varias semanas o meses) después de que el tratamiento haya terminado, para que usted vuelva a sentirse como antes. Una vez que termine, usted podrá regresar a su nivel de actividad cotidiano, especialmente si trabaja con su equipo de atención médica para darle solución a este problema.

 

Fatiga Emocional

La ansiedad, la depresión, le preocupación, el miedo y otro estrés emocional pueden contribuir a sentirse cansados. Reducir el estrés y la preocupación puede ayudarle a sentirse más enérgico. Permítase descansar cuando este mas cansado. Sea activo cuando usted se siente hasta él. Concéntrese en dormir regularmente. Si constantemente está luchando para quedarse dormido o permanecer dormido, hable con su proveedor de atención médica.

 

Fatiga Física

Otras causas de fatiga pueden incluir cosas como quimioterapia, radiación, cirugía, conteos sanguíneos bajos, dolor, cambios en la nutrición, medicamentos y anemia. Entender cuál de estas cosas está causando su fatiga le ayudara a usted y a su equipo de atención médica a hacer un plan.

 

​​​​​​​Fatiga y Trabajo

Si usted tiene fatiga relacionada con el cáncer y continúa trabajando, puede pedirles a su empleador cambios que la faciliten el trabajo. No necesita decirle a su empleador que tiene cáncer, pero deberá informar que tiene una afección médica. Obtenga consejos sobre cómo hablar con su empleador.

 

​​​​​​​La Comunicación es Clave

Comunicación buena con su equipo de atención médica le ayudará a encontrar la causa o causas de su fatiga y a crear soluciones. Sea amable consigo mismo. Sepa que usted está pasando por un tiempo desafiante y que su mente, cuerpo y espíritu están trabajando duro a través de la experiencia del cáncer para encontrar salud y bienestar. El tiempo puede ser la mejor solución para la fatiga relacionada con el tratamiento.

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Desafíos de Alimentación y Nutrición

Nutrición buena es una parte importante de cualquier estilo de vida saludable, pero un diagnóstico de cáncer puede dificultar el mantenimiento de una dieta saludable y hábitos alimenticios adecuados. Dependiendo del tipo de tratamiento que reciba, puede experimentar nauseas, fatiga, vómitos, perdida del apetito, depresión, estrés u otros efectos secundarios. Estos efectos secundarios pueden afectar el curso del tratamiento y la calidad de vida. Si le preocupan los efectos secundarios que están afectando la alimentación y la nutrición en general, hable con su médico o dietista para obtener ayuda.

No es inusual recordar solamente síntomas físicos (como nauseas) porque son más obvios a usted y a esos alrededores de usted. Sin embargo, también es importante tomar nota de cualquier factor emocional o de otro tipo que pueda afectar su apetito. Aunque es más fácil decirlo que hacerlo, comer adecuadamente y entender como su nutrición afecta su experiencia con el cáncer puede hacer una diferencia durante el tratamiento y la recuperación.

No existe una recomendación de “talla única” sobre dieta y nutrición para las personas que tienen cáncer. El tratamiento y sus efectos secundarios pueden cambiar la forma en que su cuerpo procesa los alimentos. Es posible que necesite más de cierto tipo de comida que antes. Es posible que le indiquen que evite otros alimentos porque es mas probable que causen síntomas.

 

Consejos Para Manejar su Nutrición

Su nutrición es una parte importante de su tratamiento contra el cáncer. Una buena nutrición es especialmente importante cuando su cuerpo está luchando contra una enfermedad. Una alimentación saludable puede ayudarle a:

  • Obtenga la nutrición que necesita
  • Tolerar los efectos secundarios del tratamiento
  • Reducir el riesgo de infección
  • Prevenir y manejar otros problemas de salud como diabetes, presión alta y osteoporosis
  • Mantener un peso saludable
  • Sentirse lo mejor posible

Aquí hay algunos consejos para ayudarlo a manejar mejor la alimentación y nutrición:

Por favor, hágales conocer todas sus preocupaciones y preguntas relacionadas con la dieta, sean estas de índole físico, práctico o emocional. La experiencia con el cáncer, las preferencias alimenticias y los estilos de vida varían de persona a persona, por lo que es importante tener un plan nutricional adaptado a sus necesidades y deseos.

Su deseo de comer podría disminuir por los efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer, por lo que no solo es importante comer sano, sino también aquellos alimentos que usted disfrute.

De haber algún espacio en su hogar que facilite o haga más placentera la hora de la comida, intente comer allí tantas veces como sea posible. Puede que no tenga el mismo apetito que sus familiares; por ende, las horas en que usted coma también serán distintas a las de ellos. Pida a un familiar que lo acompañe o ajuste la hora de la comida familiar para que no siempre tenga que comer solo.

Un diario no solo es esencial para mantener un registro de sus otros síntomas, sino que también es una excelente herramienta para realizar un seguimiento de su dieta. De esta forma, usted y su familia pueden estar al tanto de sus horarios de comida y sus preferencias alimenticias. También puede ser útil para asociar los cambios en su dieta con cambios de tratamiento, físicos o emocionales.

Es muy probable que su centro de tratamiento o doctor cuenten con un nutricionista certificado que pueda ayudarlo a elaborar un plan de alimentación adaptado a su situación. Manténgase alerta a las estafas o productos que prometen curar el cáncer mediante la nutrición o suplementos nutricionales. Un nutricionista certificado, enfermera o doctor son los expertos indicados para discutir los aspectos más importantes sobre su dieta o cualquier suplemento alimenticio.

Aquí hay algunas formas adicionales en que puede manejar su nutrición:

  • Cuando simplemente no sienta ganas de comer, considere beber un líquido o batidos de reemplazo de comidas en polvo (como “desayuno instantáneo”).
  • Considere comer 5 o 6 comidas pequeñas cada día en lugar de 3 comidas grandes.
  • Es posible que comer porciones más pequeñas en cualquier momento le ayuden a comer más. Esto evitará que se sienta demasiado lleno y puede ayudar a reducir las náuseas.
  • Tenga refrigerios cerca para cuando sienta ganas de comer. Cuando salga de su casa, lleve snacks como galletas de mantequilla de maní, nueces, barras de granola o frutas secas.
  • Busque maneras de agregar proteínas extra y calorías saludables a su dieta.
  • Beba líquidos a lo largo del día, incluso cuando no sienta ganas de comer. Elija líquidos que aporten calorías y otros nutrientes como jugos, sopas, leche y bebidas a base de soya con proteínas.
  • Trate de comer un refrigerio ligero antes de acostarse. Esto le aportará calorías adicionales, pero no afectará su apetito para la próxima comida.
  • Cambie la forma de ingerir alimentos. Por ejemplo, puede hacer un batido de frutas en lugar de comer una pieza de fruta sola.
  • Coma alimentos blandos, frescos o congelados, como ser yogures, batidos y paletas de helado.
  • Coma comidas más abundantes cuando se sienta bien y esté descansado. Para muchas personas, esto ocurre por la mañana después de una buena noche de descanso.
  • Beba solo pequeñas cantidades de líquidos durante las comidas. Muchas personas se sienten llenas si comen y beben al mismo tiempo. Si quiere beber algo más que pequeños sorbos, tome una bebida más grande por lo menos 30 minutos antes o después de las comidas.
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Estamos aquí para ayudarle ofreciéndole orientación personalizada y gratuita por teléfono y en línea.

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Preocupaciones Sobre el Consumo de Tabaco o Drogas

​​​​​​La experiencia del cáncer es estresante. Si usted fuma o usa otras sustancias, puede ser un momento difícil pensar en dejar de fumar. Otras sustancias pueden incluir alcohol, drogas o medicamentos no recetados para usted. Sin embargo, el uso de tabaco y otras sustancias puede dañarle a usted y a los que rodean. Las personas con cáncer que dejan de fumar o buscan tratamiento para el uso de sustancias experimentan muchos beneficios. Su tratamiento para el cáncer, su salud general y su calidad de vida pueden mejorar. Si usted fuma o utiliza cualquier otra sustancia, es importante que se lo comunique a su equipo de atención médica. Sea honesto sobre el consumo de tabaco o sustancias, incluso si no esta interesado en dejar de usarlo. Si desea dejar de usarlo, so equipo de atención medica puede ayudarle.

 

Fumando y el Uso de Tabaco

Dejar de fumar en cualquier momento traerá beneficios para su salud general y podría aumentar sus probabilidades de supervivencia. Los estudios demuestran que mientras más tiempo pase entre la fecha en que dejó de fumar y el inicio del tratamiento contra el cáncer, mayores serán sus probabilidades de recuperación, y que, si usted deja de fumar incluso después del diagnóstico, puede reducir el riesgo de experimentar los efectos secundarios del tratamiento, y disminuir su riesgo de un segundo cáncer.

Si desea dejar de fumar, hable con su equipo de atención médica sobre su consumo de tabaco. Entender su situación puede ayudarlo a determinar el mejor plan de tratamiento para que consiga dejar de fumar. Puede solicitar a su doctor que lo derive a un consejero profesional para dejar de fumar o a un consejero de salud mental.

 

Abuso de Alcohol, Medicamentos con Receta o Drogas Ilegales

Para establecer el plan de tratamiento más eficaz y controlar cualquier efecto secundario, es muy importante que su equipo de atención médica conozca sus antecedentes de consumo de alcohol y otras drogas, en especial, sustancias ilegales. Su equipo de atención médica podría preguntarle acerca de su consumo de alcohol o drogas ilegales, pero si no lo hace, usted debe proporcionar esta información voluntariamente. Las drogas y el alcohol pueden interactuar negativamente con otros medicamentos o con su tratamiento contra el cáncer y evitar que obtenga el mayor beneficio posible.

Puede estar tranquilo, pues no se le negará acceso al tratamiento si habla con honestidad sobre su abuso de sustancias. Su equipo podría alentarlo a que intente dejar, o limitar, su consumo, para obtener el mayor beneficio posible y reducir los efectos secundarios del tratamiento. Si le interesa recibir ayuda para tratar las adicciones al alcohol o las drogas, su equipo de atención médica lo ayudará a localizar algún programa en su área.

También puede ponerse en contacto con: